Nueva York • El secretario general de la Unión de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, dijo este martes a la comunidad internacional que es necesario “dejar de alimentar el derramamiento de sangre” en Siria.
El secretario general de la ONU dijo lo anterior durante su discurso de apertura de la 68 Asamblea General del organismo en Nueva York, en la cual hablarán ante los jefes de Estado de los 193 miembros, así como Estados asociados como Palestina y el Vaticano.
Ban Ki-moon también dijo que espera la ‘adopción inminente’ de una resolución del Consejo de Seguridad sobre el control de las armas químicas en posesión de Damasco, tras el compromiso alcanzado por Estados Unidos y Rusia.
La resolución ‘debería ser seguida inmediatamente de una acción humanitaria’ en Siria, donde más de 110 mil personas han muerto y dos millones han dejado sus hogares, dijo el jefe de la ONU y apuntó que se trata del ‘mayor desafío a la paz y seguridad en el mundo’.
El secretario general hizo un llamado al presidente sirio, Bashar al Asad, a la oposición y a ’todos aquellos con influencia sobre ellos’ a trabajar inmediatamente en convocar una segunda conferencia de Ginebra para hallar una solución política al conflicto.
Estados Unidos y sus aliados internacionales, por un lado, y Rusia por el otro, discuten sobre la manera de presionar a Asad para aplicar el programa de eliminación de armas químicas anunciado el 14 de septiembre en Ginebra.
En la Asamblea de la ONU hablarán la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, los presidentes estadunidense, Barack Obama, y el francés, François Hollande, entre otros.