El ex futbolista y entrenador español Luis Aragonés, gran responsable de los últimos éxitos de la selección ibérica, murió en Madrid a los 75 años.
Aragonés, nacido en Madrid el 28 de julio de 1938, fue un futbolista histórico del Atlético entre 1964 y 1974, año en el cual cambió el campo por el banquillo rojiblanco.
Entonces inició una exitosa carrera como entrenador que, además del Atlético, le llevó a equipos como Betis, Espanyol, Valencia, Barcelona, Sevilla, Valencia, Oviedo o el Fenerbahce turco, su último destino hasta hace cuatro años.
Pero Aragonés será ante todo recordado por su trabajo en la selección española, con la que conquistó la Eurocopa de 2008 después de emprender un cambio de estilo reconocido en todo el mundo por su valor estético. Esa labor la continuó, con éxito, Vicente del Bosque.
Aragonés no sólo hizo campeona a la selección española, sino que imprimió un sello que todavía se mantiene, el de un equipo amante del buen trato del balón. Demostró que con ese fútbol estético se pueden ganar títulos.
Pero a Aragonés también le acompañó la polémica y suya fue por ejemplo la decisión de apartar de la selección a Raúl.
Además, Aragonés reprochó a la Real Federación Española de Futbol (RFEF) que no hiciese “lo suficiente” por que se quedara como seleccionador.
Atrás queda un hombre con un descomunal carácter y enormemente apreciado por los futbolistas, quienes casi unánimemente le recordaron siempre con cariño.
Se espera que durante toda la jornada de la Liga española de este fin de semana se guarde un minuto de silencio antes de cada encuentro y se repitan los homenajes en todas las ciudades donde se disputen partidos.