Las dudas y el escepticismo de distintas voces de periodistas e intelectuales, así como personas en general, han comenzado a surgir y a manejar la hipótesis de que se trata de un montaje y que en realidad el detenido no es el verdadero Joaquín El Chapo Guzmán Loera, sino alguien que simplemente se le parece.
Argumentan que el caso sería idéntico a lo que sucedió con la muerte de Heriberto Lazcano Lazcano “El Lazca”, o como el caso de Nazario Moreno González “El Más Loco”, ambos oficialmente abatidos por elementos de las fuerzas federales mexicanas y cuyos cuerpos en el caso del primero fue robado y el del segundo nunca encontrado.
A la vez, otro caso emblemático (y argumento básico de la teoría conspirativa clásica), es que se trata de un espectacular montaje parecido al que se fabricó con el asesino de Colosio, Mario Aburto, quien habría sido sustituido por un “doble”.
Cabe mencionar que entre las leyendas construidas alrededor de la figura de El Chapo, está que contaba, o cuenta, con al menos cuatro dobles, personas muy parecidas a él, a quienes utilizaba para crearse una imagen de ubicuidad, capaz de estar en varios sitios al mismo tiempo, o simplemente para despistar las labores de inteligencia que buscaban su captura.
En Twitter incluso ha sido creado el hashtag #NoEsElChapo, mediante el cual los usuarios de esta red hacen bromas con la noticia; sin embargo, queda claro que las autoridades realizaron varias pruebas, entre ellas una de ADN, para confirmar que realmente han capturado a uno de las líderes del todavía vigente Cártel de Sinaloa, cuya única cabeza al frente es ahora Ismael ‘El Mayo’ Zambada.