México.- Una pareja de lesbianas casadas en el DF con residencia en Guadalajara, Jalisco, solicitaron su derecho de afiliación ante el IMSS, luego de enterarse por medio del comunicado emitido por la propia institución sanitaria el pasado 17 de febrero, en el que se aseguraba ya podían hacerlo.
Sin embargo se encontraron con una decepcionante respuesta; la Clínica 93 del IMSS en Tonalá, les negó la afiliación.
Mujer A y Mujer B, se casaron el 27 de enero de 2011 en la Ciudad de México, bajo la figura del Matrimonio Igualitario. Por motivos personales, la pareja solicitó confidencialidad para la realización de esta nota.
Mujer A, quien es una trabajadora de mantenimiento, quería afiliar a Mujer B, su esposa, quien se encarga de un negocio familiar. El 25 de febrero, las mujeres acudieron con todos los requisitos que pide el Instituto Mexicano del Seguro Social, entre ellos su acta de matrimonio.
Al llegar a la Clínica 93 del IMSS, Mujer A se presentó en la ventanilla y le pidió al funcionario que afiliara a su pareja, incluso le enseñó el comunicado impreso que decía que ya se podía hacer. El funcionario las miró extrañado y les dijo: “Permítanme un momento, voy a preguntar si ya podemos atenderlas”.
Luego de una espera de más de 25 minutos, el funcionario regresó sólo para decirles que no las podrían atender igual que a las demás parejas, argumentando que aún no contaban con los formatos correspondientes y que deberían esperar 20 días a que la autorización llegará desde el DF.
También les indicó que luego de ese plazo se comunicaran con Rocio Quintero, la funcionaria encargada de dicho trámite.
Resalta la negativa luego que el 17 de febrero pasado, el IMSS emitiera el comunicado en el que aseguraba acataría lo dispuesto por la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación:
“Esta determinación es acorde con la interpretación realizada por la Suprema Corte a la Ley del Seguro Social, en el sentido de que aun cuando la ley hace diferencias en razón de género, debe entenderse que también protege a dichos matrimonios, lo cual respeta el principio pro persona, establecido en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”.
Esta pareja de Jalisco, que no ha contado con los beneficios que por ley el IMSS les debió otorgar desde que se casaron en 2011, han tenido que gastar fuertes sumas de dinero en atención médica para Mujer B.
De hecho, hace poco ella enfermó de influenza y tuvo que adquirir medicamentos con un costo de más de 4 mil pesos, así como por consultas otros 600 pesos. Sin contar enfermedades previas.
La pareja no había interpuesto ningún instrumento legal contra el IMSS, como otros matrimonios LGBT de México, principalmente porque Mujer A es lesbiana de clóset, su familia y empleadores no están enterados de su preferencia sexual ni de que está casada con otra mujer. Así que esperaron pacientemente a que el IMSS diera este anuncio.
Su decepción no fue menor, al ver que aún hay obstáculos para reconocerlas como una familia.
Cabe mencionar que la pareja se comunicó con CONAPRED para preguntar si lo que decía el comunicado del IMSS era efectivo, el Consejo Nacional para Prevenir y Erradicar la Discriminación les dijo que sí y que el trámite no debía tardar más de un día.
“Se siente decepción, no se supone que ya se podía… llevamos todo, hasta el comunicado impreso. Sí es así como decepcionante”, lamentó Mujer B.
Al día de hoy, el IMSS no ha dado mayores especificaciones, en algunos estados como Tamaulipas, Nuevo León y Morelos, la dependencia ha dicho que afiliará a todas las parejas que cumplan con los requisitos, sin importar su preferencia sexual, sin embargo en la práctica las cosas siguen siendo como antes. Vean la siguiente liga: