Colima, México (1 de agosto de 2013) El municipio de Manzanillo pretende refinanciar con el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) 62.4 millones de pesos de deuda a un plazo de 20 años, además de solicitar un crédito de 11 millones de pesos para el Fondo de Aportación para Infraestructura Social (FAIS).
El delegado de Banobras Omar Magaña Ceballos afirmó que el municipio porteño es el único que de manera formal ha iniciado con sus trámites para refinanciar ante el Congreso del Estado dos créditos que suman 62.4 millones de pesos, mismos que son pagaderos a 9 años.
Explicó que el municipio que dirige Virgilio Mendoza Amezcua pretende homogenizar a 20 años todos los créditos que tiene y recordó que en el 2008, el municipio porteño reestructuró 120 millones de pesos. “Fue con Banobras y son pagaderos a un plazo de 20 años, así es que ahora pretende homogenizar todos sus créditos en ese plazo y esa es la solicitud que se está haciendo al Congreso”, dijo.
El delegado federal manifestó que el Ayuntamiento de Tecomán también ha mostrado interés en realizar este procedimiento financiero que le permitiría obtener recursos económicos nuevos, pero indicó que en este caso se analizará si es la mejor opción para dicho municipio.
Luego, refirió que si el Congreso local ha detectado que hay municipios que están en riesgo de una quiebra técnica como lo señaló el diputado Martín Flores Castañeda: “Tendría que haber una reunión en el Congreso para que expliquen los ediles, cómo van a cerrar el 2013; es decir, cómo le harán frente a los compromisos de fin de año. ¿Ustedes creen que desde principio de año no se visualizaban estas situaciones?, entonces ¿Porqué no hemos hecho nada?”.
Omar Magaña Ceballos refirió que Banobras con el Gobierno del Estado desde el año pasado trabajaron en mejorar el perfil de la deuda, en la restructuración, y en invertir en servicios públicos, “porque las finanzas son un vehículo para generar mejores condiciones de desarrollo de la entidad y los municipios deben hacer lo mismo”.
Al preguntarle sobre la calificación negativa que la empresa Fitch Raiting dio a la perspectiva crediticia del Gobierno de Colima, el delegado de Banobras respondió que ese señalamiento es una llamada de atención o una tarjeta amarilla para la administración estatal.
“Al cambiar la perspectiva de estable a negativa lo que le dice Fitch Raiting al gobierno es que le bajará la calificación si no cumples con el programa de racionalización del gasto y sigue presionando el gasto y su endeudando. Es como una tarjeta amarilla, pero la calificación se la sostuvo y Colima es una de las 10 entidades federativas mejor calificadas”.
Luego, añadió: “Yo platicaba con el Ejecutivo que debemos preservar la calificación porque no nada más ayuda a la imagen y a la buena calidad crediticia del estado, sino que ayuda también a los municipios porque en una situación de emergencia, el estado se constituye en aval de los municipios”.
