El legislador por ese municipio, Donaldo Ricardo Zúñiga, dijo que es urgente que el alcalde Braulio Arreguín Acevedo tome cartas en el asunto, pues existen seis quejas ante la Comisión de Derechos Humanos.
Colima, México (30 de agosto de 2013) El diputado por Comala Donaldo Ricardo Zúñiga exhortó al presidente municipal Braulio Arreguín Acevedo a poner orden y garantizar el respeto a los derechos humanos, pues sostuvo que van en aumento las quejas en contra de policías municipales, a quienes acusan de prepotencia, detenciones arbitrarias y abuso de autoridad.
En este sentido, el legislador panista indicó que existen por lo menos seis quejas que se interpusieron ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Colima (CDHEC) en contra de dos policías municipales, a quienes se les acusa de actos arbitrarios en contra de la población.
“Estaré al pendiente del proceso que llevan estas quejas en la Comisión y el presidente municipal está enterado de la situación, porque ya ha habido reuniones con la población donde le han externado su preocupación por los abusos policíacos, sobre todo con la población del Barrio Alto, una de las zonas más conocidas de Comala”.
Luego, el legislador afirmó que es necesario que el alcalde impida que se sigan cometiendo abusos en contra de la población y explicó que hace tiempo el edil dio de baja a un elemento policiaco que no cumplía con su función y por el contrario actuaba con prepotencia.
“Esto no puede estar pasando en Comala ni en ningún otro municipio de la entidad. La represión policiaca, las violaciones a los derechos humanos, son situaciones que alteran la tranquilidad de la población, ya que las corporaciones policiacas son las que deben de proteger a la ciudadanía y en estos momentos lo que está sucediendo en Comala es que los policías están actuando con abuso de autoridad”.
Donaldo Ricardo Zúñiga explicó que el exhorto va encaminado a que el alcalde Braulio Arreguín continúe con el proceso de depuración de la policía y en caso de que se detecte que alguno de los elementos necesita capacitación en materia de derechos humanos, “que se le otorgue, para que comprenda que su proceder no puede ser autoritario, es decir la firmeza no puede convertirse en un abuso de autoridad”.