En el boletín oficial de la presidencia de la república de México se detalla que al arribo de las Fuerzas Federales el detenido se escondía en el clóset y estaba acompañado de un menor, quien quedó en estado de “presentado”.
Se remarca además, que el operativo se realizó sin “un solo diparo” y que fue producto de “tareas de inteligencia”. Esto significa que los 30 millones de pesos que se ofrecían a quien diera datos que propiciaran la captura de Dionisio Loya Plancarte se han esfumado dentro de la Procuraduría General de la República o de la partida presupuestal correspondiente.